La película dirigida por Jon M. Chu se estrenó en el 2018, y está basada en la novela de Kevin Kwan Locos, ricos y asiáticos que forma parte de una trilogía. Además, es la primera película de un importante estudio de Hollywood en presentar un elenco totalmente asiático en más de 20 años.
Siendo una comedia romántica, vemos una historia repetida: una enamorada pareja, Rachel (Constance Wu) y Nick (Henry Golding), viaja a Singapur para la boda del mejor amigo de Nick, y es ahí dónde Rachel se entera que Nick es parte de una de las familias más ricas y poderosas esos lares. Rachel va descubriendo que la familia de Nick es muy tradicional, que ponen el deber con la familia por encima de todo, y que tal vez para la madre de Nick su título de profesora de economía de NYU no sea suficiente. Los impedimentos que obstaculizarán que este amor fluya serán temas como el dinero, las clases sociales, y cómo no, la oposición directa de una parte de la familia -en este caso la del novio- que no considera a la novia plebeya lo bastante buena. Rachel sentirá el rechazo del entorno de Nick, y empezará a dudar de la relación.
La rivalidad entre Rachel y la madre de Nick (Michelle Yeoh la interpreta con una frialdad que intimida), permite explorar los prejuicios que existen entre los asiáticos natales y aquellos que emigraron a Estados Unidos. El constante ir y venir entre la persecución de la felicidad versus las responsabilidades impuestas por la tradición y la familia figuran en toda la película.

Crazy Rich Asians usa fórmulas conocidas (la familia que desaprueba, el choque cultural y las envidiosas que conspiran contra la pareja). Afortunadamente, su carismático elenco, liderado por la perfecta química de la pareja protagónica, se eleva sobre sus pocos defectos con un guion que combina momentos absurdos y graciosos, con elementos novedosos, como la cultura (la extravagancia económica, la moda) y los paisajes de Singapur; lo que la hacen también altamente atractiva visualmente.
Debo mencionar el personaje de la mejor amiga de Rachel, Peik Lin Goh (interpretada por Awkwafina, a quien vimos en Ocean’s 8 y The Farewell), y toda su familia, ya que reflejan claramente los excesos de la clase alta de Singapur, el color, la moda, y al mismo tiempo muestra lo importante que es la aceptación entre las familias de ese lugar para poder ‘ser alguien’ en esa sociedad. Todas las escenas entre estas amigas son divertidas, pero hay que destacar la escena del almuerzo en casa de Peik Lin Goh que cuenta con la aparición del genial Ken Jeong interpretando al padre de la amiga.
Por Malena Gamarra