El single atrapa este sentimiento de prisión social y nos la presenta junto a un ritmo de sonoridades hip hop con matices andinos.
“Remolino” nos quita la venda de los ojos y expone lo polarizado y salvaje que es vivir (o sobrevivir) en una ciudad cómo Lima, donde las autoridades, gestores y demás entidades están totalmente de espaldas con las necesidades del ciudadano. Aun así, también se habla de vivir con todo eso, encontrando la salvación en el amor, diversión y algo que nos saque de la realidad, creando un equilibrio entre lo caótico y poético de vivir en una sociedad en desmoronamiento.
El sonido que Iván Castro, sigue manteniendo la frescura y libertad que lo caracteriza, esta vez encontrando un balance entre el estilo sincopado del rasguear del huaino, con una base de hip hop clásico, bombo y caja andino contra el sistema.
Como en antiguas producciones de Comandante Castro, están realizadas por el mismo en su home estudio con el apoyo de Arigatoo, luego fue mezclado y masterizado por la gran Ariel.
El track ha sido presentado junto a videolyric que retrata de forma cruda situaciones cotidianas provocadas por el caos de la ciudad.