Continúa la primera edición de la competencia oficial del Nuevo Teatro Julieta con Parto, conferencia escénica, obra escrita por Carla Valdivia y dirigida por ella y Analucia Rodríguez, que cuenta con las actuaciones de Marianne Carassa, Brayan Pinto y Daniela Zea.
La relación con la madre es quizá el lazo más fuerte para la mayoría de las personas. La influencia de su presencia o de su ausencia nos acompaña por toda la vida. Y sin duda un momento fundacional de esta relación es el nacimiento. Lo que nos ofrece Parto es la oportunidad de revisar este importante lazo y rendir homenaje a las madres a través de las propias experiencias de los actores que están sobre el escenario centrándose en lo simbólico de tres momentos del parto: la dilatación, la expulsión y el alumbramiento.
Cada uno de estos tres momentos representa las diferentes etapas de las relaciones materno-filiales; viajamos a través de sus complicaciones y de momentos que marcan la personalidad de los hijos, moldeados a imagen y semejanza de sus madres. Cada uno de los actores expone las historias de cómo fueron sus alumbramientos, aunque apoyados por el registro de madres contando sus experiencias en aquellas horas en las que vivieron mucho dolor y nerviosismo.


La obra apunta a que sintamos como propias las historias de estos tres actores, los cuales no solo exponen sus experiencias, sino que también las convierten en danza y en representación dramática de pasajes familiares que, en lo personal, resultaron muy conocidos para mí. En ese sentido, la obra acierta al llevarnos a rememorar nuestras propias experiencias en la relación con nuestras madres.
Sin embargo, al ser esta una conferencia, no me queda clara la conclusión a la que nos quiere orillar, a pesar de que es un montaje muy bien logrado y disfrutable. Visualmente, los elementos sobre la escena nos crean un ambiente que acierta al rodearnos de recuerdos entre madres e hijos (los actores), pero también por proponernos una decoración de concierto, dado que esta obra también tiene momentos musicales. El mejor de ellos, sin duda, el de la mazamorra de maicena.
Debo destacar por sobre todos los elementos la versatilidad y talento de Bryan Pinto, a quien se le ve convincente y verosímil en los momentos en que tiene que interpretar a una abuela, pues de esa manera demuestra un gran talento tanto para el drama como para la comedia.
Las funciones de Parto van hasta este domingo 13 de agosto y espera que la nostalgia y la empatía la coronen como la vencedora de la primera competencia oficial del Nuevo Teatro Julieta.
Por Christian Ávalos